La paciencia

Una de las moralejas que se puede extraer de la frase de esta semana es que con paciencia y trabajo una persona es capaz de alcanzar la meta que se proponga. Pero he aquí uno de los defectos más comunes que nos encontramos hoy día (empezando por mi), la impaciencia. Y no hablo ya del típico "capullo" que está apunto de rebentar el pito del coche cada mañana en la M-30, hablo de la impaciencia en general. En la impaciencia con la pareja, en la impaciencia con los compañeros, en la impaciencia con los amigos, en definitiva no tenemos paciencia con nada, ni con nadie.

A veces yo soy el primero que salta a la mínima, y debería pararme, respirar 5 segundos, y después abrir la boca (paciencia), ¿que es lo que se consiguiría con esto?, pues posiblemente no meter tantas patas como se mete (meto).

Para conseguir un objetivo, también hace falta paciencia, machacar y paciencia, a parte de ser constante y no desesperarse, y aquí entra la paciencia, en la desesperación, que conlleva el cagarla, tener prisas por: volver a jugar a futbito, por tocar pronto un instrumento, tener prisas..., por hacer un viaje.

Pero también me asalta un conflico, ¿está la paciencia en confrontación con la filosofía de vida : "carpe diem"? Yo la verdad es que no lo se, pero lo que si se es que debo aprender a ser más paciente en todos los aspectos de la vida, de esa forma obtendré más frutos, pero sin olvidar, claro está: que sólo se vive una vez...